Nació en 1948, hijo de Ángeles y Gabriel, en el Carril de la Romera entre Patiño y la Ermita. Empezó con su padre desde bien crío, con seis o siete años ya se iba con él a las misas de aguilando , las misas de Gozo en Patiño a las 6 de la mañana, y en la ermita de los Alburquerques a las 8.
Desde la Purísima hasta los Reyes no se perdían ninguna. Su padre Gabriel Gallego, era uno de los cantaores de Patiño, junto con el Tío Joaquín López y Manolo Cárceles El Patiñero , y él fue entrando como panderetero.
Antonio Gallego Belando, así es como se llama nuestro próximo hermano de honor de las benditas Ánimas de Patiño, con catorce años, su intención era tocar la pandereta y ya Manolo El Patiñero” le dejaba tocar un poco. Hasta que un día le dijo:»¿Quieres tocar en la Fuensanta conmigo?» Y allí que fue, y tocó. A Manolo le gustó como tocaba, y empezó a colaborar con él, como por ejemplo en un concurso de aguilando que se celebraba en radio nacional de España, donde tocó la Rondalla de Patiño.
Siguió tocando en la Ermita y en Patiño, junto a su padre y cuando Manolo cantaba le dejaba la pandereta, con el Punto (otro panderetero) . Y en la ermita Paco el Ciego, se la cedía también.
Tocaba en la iglesia y en la cuadrilla, pidiendo el aguilando por toda la huerta de Patiño. O por Nonduermas y Rincón de Seca, como músico buscado para la ocasión.
Tiene como referencia a su padre Gabriel, y a su abuelo Antonio, ambos cantaores de aguilando. De su abuelo Antonio, ha recordado el estilo que tenía al cantar y le hemos pedido que nos lo interpretase para incorporarlo a nuestro disco de Aguilando recién publicado. Concretamente en Aguilando de los Rodríguez, apodo por el cuál conocían a su padre y a su abuelo.
Su hijo Gabriel Manuel, actualmente está con nosotros en la Hermandad,
como representante de la familia Gallego Belando, entrega este galardón
Fotografía: Ana Bernal y Gabriel Gallego